La ley que promueve la paridad de género en los medios de comunicación obtuvo 134 votos a favor, 9 en contra y 0 abstenciones. Argentina se convierte en el primer país en el mundo que cuenta con una norma de estas características. El proyecto contaba con media sanción del Senado. Crónica de un debate caliente que culminó a la madrugada.
Por María Quintero*
Esta madrugada terminó en la Cámara de Diputados y Diputadas una jornada maratónica y políticamente histórica para los transfemismos: Es Ley la equidad de género en los medios de comunicación y obtuvo El proyecto que contaba con media sanción del Senado, obtuvo 134 votos afirmativos y 9 negativos.
Cupo laboral Travesti, Trans y transgénero
La sesión terminó aproximadamente a las 4 de la madrugada. El primero en tratarse fue el proyecto de ley de inclusión laboral para la población trans, travesti y transgénero con 207 votos a favor; 11 en contra y 7 abstenciones; éstas dos últimas expresiones correspondientes a diputados de Juntos por el Cambio, en su mayoría del PRO.
El proyecto de Ley establece que el Estado deberá contratar al menos el 1 por ciento de la dotación de la administración pública, en todas las modalidades de contratación regular vigentes. Ahora irá al Senado.
En el debate por la media sanción, que terminó casi a la una y media de la madrugada, sobrevolaron los nombres de las dos militantes y activistas Lohana Berkins y Diana Sacayan mientras les compañeres travestis y trans aplaudían desde los balcones del recinto.
Se escucharon a favor del proyecto de Ley importantes discursos en lenguaje inclusivo, expresiones diversas, en un hecho histórico que denota un cambio en clave de construir una nueva forma de entender y hacer política, una política transfeminista para construir una sociedad más justa e igualitaria.
En el inicio del debate, la presidenta de la comisión de Mujeres y Diversidades, Mónica Macha, destacó: “Hoy estamos poniendo en el centro de la conversación política que no somos varón o mujer, que no somos lo que nuestros genitales nos obligan, que no somos la cárcel de un cuerpo”.
“Esta Ley ataca al patriarcado, ataca el biologicismo. Estamos poniendo en agenda los mandatos biológicos y desmontando el binarismo”, agregó.
Gabriela Estévez, por su parte, expresó:“Hoy seguimos transitando ese camino a la reparación que comenzó en el 2004, cuando Diana Sacayán decía, ‘hasta que no podamos ponernos en la piel del otro, no vamos a poder pensarnos como sujetos transformadores de la realidad’. Y este proyecto se trata de eso. Es un paso más”.
En uno de los discursos más emotivos de la noche, enfatizó: “El propósito de esta Ley es que las travestis y mujeres trans puedan desarrollar sus proyectos de vida sin verse obligadas a migrar hacia las grandes ciudades para prostituirse, que los pibes trans no tengan que vivir sus identidades en la clandestinidad para acceder cuanto mucho a trabajos precarizados”.
Por el radicalismo, Brenda Austin dijo que “en los procesos de reparación, de transformación cultural, cada voto cuenta, y cada acción de acompañamiento es un esfuerzo más en acelerar esa transformación que es innegable”.
Por su parte, Leonardo Grosso expresó: “Es muy difícil hablar en este lugar porque todavía no hay compañeras travesti o trans en estas bancas y necesitamos construir eso para que este Congreso sea un poco más igualitario”.
El cierre del debate estuvo a cargo de Cristina Álvarez Rodríguez, quien expresó: “La vida no es igual para todos, todas, todes. Tenemos una deuda como Estado que debemos reparar. Porque tener trabajo, es tener dignidad. El colectivo travesti trans no solo existe, su lucha está más presente que nunca”.
La votación del proyecto de ley también dejó evidenciado la postura contra las políticas de ampliación de derechos que suele tener el PRO y mostró las diferencias ideológicas de los socios de Juntos por el Cambio en relación a las políticas de género. Por un lado, la Unión Cívica Radical y la Coalición Cívica, en su mayoría, avalaron la iniciativa, por el otro, el PRO, tuvo a tercios de sus miembros dándole la espalda al tema.
De los 53 diputados del PRO, sólo 18 acompañaron la sanción del proyecto, en tanto que 11 lo hicieron en contra, 4 se abstuvieron y 20 estuvieron ausentes. Desde el radicalismo, con sus 46 integrantes, una mayoría de 41 lo hizo a favor, uno de sus integrantes se abstuvo y cuatro estuvieron ausentes. Por la Coalición Cívica, en tanto, 10 de sus 14 miembros lo hicieron a favor, uno se abstuvo y tres no participaron de la votación.
Es ley la paridad de género en medios de comunicación
El segundo proyecto que se trató en la madrugada en la Cámara de Diputados y Diputadas y que se transformó en ley poco después de las 3.30 horas. fue el que tiene que como fin promover la equidad de género desde una perspectiva de diversidad sexual, en los servicios de radiodifusión sonora y televisada del Estado Nacional, cualquiera sea la plataforma utilizada. Además, contempla un cupo para personas Trans del 1%.
La aprobación se logró con 134 votos a favor, 9 en contra y 0 abstenciones. El proyecto había sido presentado en el Senado por la senadora Norma Durango, del Frente de Todos representante de La Pampa, y fue impulsado en Diputados por las diputadas Mónica Macha y Gisela Marziotta en construcción colectiva con diferentes redes de periodistas feministas como La Red Par y LATFEM, entre otres.
Con la sanción de esta ley, Argentina se convierte en el primer país del mundo en tener una Ley de paridad en los medios de comunicación. La normativa, que fue girada al Poder Ejecutivo para su promulgación, establece también que los servicios de comunicación operados por prestadores de gestión privada, a los que se otorgue el certificado de equidad en la representación de los géneros, tendrán preferencia en la asignación de publicidad oficial.
La Ley fue sancionada a pesar del lobby que llevaron adelante los medios de comunicación a través de la desinformación y las noticias falsas sobre los fines y objetivos del proyecto. Algo que no sorprende, luego de haber transitado durante varios años el debate desigual contra las corporaciones económicas por la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Este lobby se vio reflejado en cómo la oposición política intentó vaciar la sesión y no dar el quorum para el tratamiento.
El argumento de las corporaciones aseguraba que era una ley que obligaría a los medios privados, cuando en realidad, el espíritu de la Ley no es obligar, sino premiar a aquellos medios que demuestren avances en equidad de género. La Ley es un paso importantísimo contra la desigualdad histórica en el acceso al trabajo en los medios de comunicación para mujeres y trans.
Sin embargo, contra todo pronóstico de los medios hegemónicos, el texto, que no recibió modificaciones, manifiesta, entre otras cosas, que la autoridad de aplicación establecerá un registro para los medios de gestión de privada y emitirá certificados de equidad a los que se accederá mediante la demostración de avances anuales en al menos cuatro requisitos como: equidad de género en el personal contratado, capacitación en género y comunicación, acciones de apoyo en distribución de tareas de cuidado, salas de lactancia y guarderías, promoción del lenguaje inclusivo y protocolos contra la violencia laboral y de género.
Mónica Macha manifestó en Twiter: “¡Tenemos Ley de Equidad de Género en Medios de Comunicación! A pesar de las presiones de los grupos mediáticos, del lobby para vaciar la sesión y el boicoteo a la construcción transfeminista, hemos conseguido una nueva victoria”.
Fuente: Periodismo por venir (https://revistappv.com.ar/)